Sin saber de dónde
viene y de lo que está hecho, la gran mayoría le conoce.
Si es benigno, se
desprende que debería hacer bien. La gran mayoría asegura haber sufrido por su
causa.
Si su valor es
indeterminado, entonces: ¿por qué es necesario someterlo a fuego?
Y si en él no existe
engaño ni envidia: ¿por qué son las primeras debilidades que saca a relucir de
nosotros?
Las preguntas sobre
él de seguro que no poseen una explicación razonable; porque después de todo…el
amor es el amor: sustancioso e inconsistente, amable y cruel, amigo y enemigo;
una extraña mezcla de convicciones y contradicciones.
Le resulta fácil
convertirse en huésped; incluso si no ha sido invitado. Lo que nadie puede
asegurar, ni aún él mismo, es si permanecerá.
Hola Jennieh, me ha encantado tu micro. Muy original y con mucho sentimiento!!
ResponderEliminarBesos!!
Raquel, hola. Me alegra que te guste.
ResponderEliminarUn beso.
buen relato y hermosa reflexión . Un beso y ten un genial fin de semana
ResponderEliminarGracias Citu. Lo mismo te deseo.
ResponderEliminarUn beso.